Pues eso, pero más que tarde, casi día completo, ya que después de la correría matutina (con baño en el Mediterráneo incluido), a las 11 me fui a la natación terapéutica y aquello estaba "petao", ya que normalmente somos 3 ó 4, pero hoy éramos 6, y como al principio empezamos con los estiramientos y flexiones, pero tirados por los suelos, a ver, tirados, pero en las esterillas esas, que no es que estemos ahí arrumbaos, que tampoco es eso… (si me leyera Mariví -la profe-, seguro que me mandaba sesión doble de ejercicios pre-baño… jejeje). Por suerte en la piscina municipal (cubierta y con la temperatura del agua a unos 27 ó 28 grados) no había mucha gente y pudimos usar tres calles, de forma que nos pusimos 2 en cada una. Y aún así, no hoy, pero otros días en los que estamos 3 ó 4 en una calle (de la piscina) algunas veces hasta hay que ceder el paso, y eso que según leí en los papeles esos que dan con los horarios y tarifas dicen que puede haber ¡hasta 8 personas en cada calle! ¡la vien! eso debe ser mortal, ¡eh tú que no has puesto el intermitente! que tires por tu derecha (aquí es al revés que en la carretera, lo mismo es que las piscinas las inventaron los ingleses). Y lo peor es cuando vas nadando de espaldas o con los brazos abiertos (en cruz), porque siempre es el otro el que no mira si tú vas a chocar, porque tú siempre miras, y te apartas, que si no… habría más coscorrones de los que hay… sí, me refiero a cuando lo de la natación terapéutica, que yo aún no he asistido a un acto de esos en masa para nadar… pero me he apuntao… ahora sólo falta que me llamen, aunque a estos follones de 8 por cada calle, a los que me refería son a cuando vas "por libre" (o a "nado libre" que lo llaman) que se ve que el día que esté a tope cada calle debería llamarse de otra forma… en fin…
A las 3 y pico, tenía médico, para que me mandara al oftalmólogo/oculista de la seguridad social para que me mirara eso del glaucoma (para saber si lo tengo o no, o al menos para tener otra opinión más, no ya por la esperanza de que te digan que el "otro" se equivocó, sino… bueno, sí, a ver si el "otro" se equivocó, porque lo mismo se equivocó, y si no se equivocó, pues… nada, ¿qué le vamos a hacer? a curarse o intentarlo… ¡qué remedio!), me han dado cita para el 29 de Diciembre, martes, lo que no recuerdo es la hora.
Como suele ser habitual, o al menos ocurre la mayoría de las veces, el que entra antes que tú (ya sea el que entró justo antes o un par de ellos antes, pal caso es igual), se entretiene más de la cuenta, y los que esperan (esperamos), desesperamos, pero algunos desesperamos más que otros, y, allí había un par de marujas y una aprendiz de ídem, que no es por meterme con las marujas, que no es eso, es que así son las cosas y así se las hemos contado (que decía el del telediario de Antena 3), bueno, vale, había allí dos mujeres de profesión ama de casa con algunos añillos y otra que supongo que también sería ama de casa y que al mismo tiempo trabaja en algún sitio fuera de su casa (esta última es la aprendiz de ídem), y allí estaban las tres que si el médico es mu lento, que si tuviera que ganarse la vida recogiendo aceitunas, que si habrá alguna muchacha y la estará reconociendo bien, que si van a por una receta y ya la revisa de arriba a abajo, y cosas parecidas, por supuesto, después nos tocó a los que estábamos allí, que éramos dos, pero nos pusieron bonicos, que si los hombres pacá, que si los hombres payá, que si no hacemos ná, que si to el día en el bar… en fin… uno deseando de que la siguiente en entrar fuera la que más cascaba… pero resulta que fue otra la que entró, y no hubo forma de librarnos de todo lo que nos decían (no a nosotros directamente, pero eso de "todos los hombres" pues… en fin…), después me tocaba entrar a mi, porque a pesar de que ellas llevaban allí más de media hora, no les tocaba hasta un buen rato después, aunque la aprendiz de ídem se coló que tenía que entrar a las 4 y cuarto, cuando entró también recibió su repaso, que si se podría haber venido antes, que si esto que si lo otro… en fin… al menos la espera fue entretenida y tal como fue (o casi) es como te la he contado, jejeje.
Dejando la sala de espera a un lado, te sigo contando: Cuando voy al médico, que ya casi ni voy, porque como ahora las recetas de las pastillas que me tengo que tomar para la tensión y el azúcar las tengo todas las de un año en la tarjeta sanitaria (aquí en Andalucía a pesar de todo estamos más informatizados que en otros sitios, dinero no habrá pero técnica, de sobra), como te decía, cuando voy al médico suelo aprovechar para ver al enfermero a que me haga la revisión de rutina, toma de la tensión, mirar el azúcar, el peso, etc. Y ya que estaba allí, le pregunté lo que había que hacer para ponerme la vacuna de la gripe, ¿la de la gripe A? me preguntó, no, la normal, le dije yo, que me han dicho que si estás resfriado o con síntomas no debes ponértela, no, sólo si tienes fiebre, ¿tienes fiebre?, no, entonces espera que te la pongo, ¿ya? sí, ahora vengo. Y vino, y me la puso en el brazo derecho, y ni me enteré, sólo de cuando clavó la aguje, pero porque estaba yo pendiente, no mirando, sino así como con los ojillos entrecerraos… atento a los golpecillos esos que te dan y que te la clavan (nunca mejor dicho) en uno de ellos, plin, ya la clavao, y justo después de darme cuenta ya estaba tirando el envase… mejor así, que a alguna gente le sienta mal esa inyección, que se ponen mu malicos… o casi…
Más tarde, había pensado en ir a hacer unas fotos a la puesta del sol, y Mari Carmen (mi parienta) quería ir conmigo, pero como yo después tenía tenis, no estaba muy segura de ir, y al final no fue… ¡me abandonó por el Eroski! 🙁 En realidad no fue por el Eroski ya que se fue con una amiga y con su cuñá de compras a Vélez, las compras la iban a hacer las otras, pero casi como si lo si fuese… no voy a decir nada de que si a algunas les gusta mucho eso de ir de compras, aunque sólo sea por ir… en fin… total que me fui a hacer las fotos, pero el día no acompañó, que con las nubes que había, aunque estaba chulo no conseguí sacar el sol como el del otro día (el que estaba como un disco rojo), de todas formas, te dejo una foto para que veas cómo estaba aquello, aunque para esa hora, el sol ya se había ocultado, pero está chula la foto, y las nubes que parece que todas señalan para donde está ocultándose el sol.
Foto 1. Atardecer en el Playazo, 04/Nov/09 18.20
Y después de las fotos, el tenis, hoy a las 7 con el grupo de "los mayores", aunque juntos, pero no mezclados, nosotros a la pista de abajo, los otros a la de arriba. De nuestro grupo fuimos San, María José, Vanesa y yo, el resto de gente fue ayer martes, que salvo los lunes y viernes, el resto de días estamos repartidos con el grupo de los mayores/buenos.
También iba a venir Sandra (Dra, San-Dra) pero estaba malita y como que no tenía cuerpo para ir, bueno, tenerlo, lo tenía y supongo que lo sigue teniendo, pero no en forma, como para ir a jugar al tenis, y otra que a lo mejor venía era Gema, pero también está pachuchilla (o malita, pero para no repetir) y tampoco vino. Allí estuvimos peloteando (y alguna embarcando pelotas), y a pesar del viento, más o menos estuvimos dando raquetazos, hasta que nos tocó subir a la pista del profe, y los otros se vinieron a la nuestra, que por cierto, hoy casi eran multitud, ya que aparecieron 6, cuando lo habitual es que sólo vayan 4. Y así, entre peloteos, prácticas y pérdidas de tornillos y otras perlas, transcurrió la hora.
Después llegaron Serena y Antonio, para la hora esa que tenemos los miércoles, pero sin profe, sólo que San y yo no nos quedamos a jugar esa segunda hora porque nos hemos apuntado a taichí, que también lo da Ángel, precisamente después del tenis, para probar a ver qué tal… y lo hemos probado, un solo movimiento, porque esto hay que ir poco a poco, pero… ¡que mal lo he pasado! no porque esto sea malo ni muy duro, que no es eso, es que yo soy mu torpe, y claro, como hay que hacer varios movimientos, pues… como que no me acordaba de cuáles eran y… me pongo mal conmigo mismo… cosas mías, vale, pero… al final me fui metiendo en el papel y… casi, casi… a ver que tal se me da el viernes próximo, porque querer aprender quiero, pero… en fin…
Ah, Mari Ángeles va al taichí, pero ella ya lleva más tiempo, e incluso ha acabado una de las … (no sé cómo se llaman, digamos, técnicas o formas de practicarlo), pero ninguno le habíamos dicho nada de que San y yo iríamos, para darle una sorpresilla, y claro, estaba casi como loca (un poquillo más de lo habitual, sí) de que fuéramos, aunque no sé yo si podré aguantar… a ver, por la mañana a correr y ahora los lunes, miércoles y viernes en el taichí, tendré que aprender a relajarme más rápido de lo que yo pensaba porque si no… en fin… jejeje, que no, que ya le he dicho que si se pone pesá la tiro a la piscina (la que hay donde hacemos el taichí), es que no paraba de corregirme las posturas… en fin… paciencia… sí… Ya te contaré el viernes que tal… aunque creo que como ella ya sabe más, estará por allí, pero no en el mismo grupo nuestro… ¡menos mal! jejeje
Y esto ha sido todo… o casi… porque hubo más pero tampoco es plan de contarlo todo, que con la pechá de escribir que me he dao… es más que suficiente 😉
Nos vemos.
Guillermo
Terminado de escribir en Nerja el 5 de noviembre de 2009 a las 18.11, aunque publicado con fecha del día 4 para que aparezca en su sitio
Guille: la foto es I M P R E S I O N A N T E
gacias, imáginate cómo serÃa al natural jejejeje
el resto de las fotos (en Picasa):
http://picasaweb.google.es/fotos2009.2.elguille.info/AterdecerEnElPlayazo04Nov09